¿Por qué el omega 3 es bueno para la salud?
Un número creciente de estudios indica que los ácidos grasos omega-3 proporcionan numerosos beneficios para la salud. Por ejemplo, entre los beneficios más comúnmente atribuidos al omega 3 están:
- ayudarían a mantener la salud cardiovascular al desempeñar un papel en la regulación de la coagulación de la sangre y la constricción de los vasos;
- serían importantes para el desarrollo neurológico prenatal y postnatal;
- podría reducir la inflamación de los tejidos y aliviar los síntomas de la artritis reumatoide;
- podría desempeñar un papel beneficioso en las arritmias cardíacas (latidos irregulares);
- ayuda en pacientes afectados por la depresión;
- detener los déficits mentales de los ancianos.
Los ácidos grasos omega 3 que se encuentran en el pescado (EPA y DHA) son los que parecen aportar los mayores beneficios a la salud. Entre los pescados con alto contenido de omega 3 y al mismo tiempo con bajo contenido de contaminantes ambientales y ecológicos se encuentran:
- salmón salvaje de Alaska,
- El salmón del Ártico,
- Caballa del Atlántico,
- Sardinas,
- Anchoas,
- Trucha arco iris de piscifactoría,
- Atún de aleta amarilla.
¿Cómo tomar omega 3?
Además de comer pescado, otra forma de consumir ácidos grasos omega 3 es tomar suplementos. Los aceites de pescado se obtienen de una gran variedad de peces, siendo los más utilizados las anchoas peruanas.
Hay que tener en cuenta que los contaminantes, como los PCB, se acumulan en el aceite de pescado al igual que en el pescado, por lo que es importante comprar suplementos (por ejemplo, cápsulas comunes) elaborados con aceite de pescado purificado.
¿Qué alimentos contienen omega 3?
Las fuentes alternativas de omega 3 pueden ser las semillas de lino, las nueces y el germen de trigo. Aunque lo son, no parecen aportar el mismo beneficio para la salud que el omega 3 que se encuentra en el pescado, el marisco y las algas.
¿Es peligroso comer demasiado pescado?
En general, el pescado es una fuente de alimento saludable y puede consumirse con seguridad en la mayoría de los casos. Pero dependiendo de la edad y las circunstancias, algunas personas deberían limitar la cantidad de pescado que comen. De hecho, tampoco hay que subestimar la posible contaminación del pescado.
En el caso de los niños y las mujeres en edad fértil, el consumo excesivo de pescado contaminado con mercurio puede afectar al desarrollo del niño. Las personas con alto riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares deben sopesar el riesgo de comer pescado con alto contenido en PCB frente a los beneficios de comer pescado con alto contenido en omega-3, en cuyo caso los beneficios de los omega-3 pueden superar el riesgo de complicaciones para la salud.