Larvas oceánicas: comen plástico y reducen el dióxido de carbono.
Hay criaturas oceánicas que comen plástico y dióxido de carbono, según un nuevo estudio del Aquarium Research Institute di Monterey Bay. Estos animales se denominan larváceos y podrían desempeñar un papel fundamental en la lucha contra la contaminación de los océanos y los efectos negativos del cambio climático.

Según un nuevo estudio, las larvas oceánicas son capaces de comer plástico y reducir el dióxido de carbono en el medio ambiente. Los océanos de la Tierra siempre han sido considerados lugares llenos de misterio donde leyendas milenarias han estimulado la imaginación de millones de personas.
Los investigadores han descubierto que no sólo los océanos son indispensables para el equilibrio de todo el ecosistema de la Tierra, sino que también están poblados por criaturas que a todos los efectos desempeñan una importante función para el medio ambiente.
La peculiaridad de los larváceos es que producen una sustancia similar a la consistencia del moco que las rodea y que puede alcanzar un tamaño incluso superior a un metro y medio de diámetro.
Según los investigadores del Aquarium Research Institute di Monterey Bay, estas criaturas tienen una labor muy importante para la salud de la Tierra, ya que, además de los microplásticos, son capaces de eliminar grandes cantidades de dióxido de carbono responsable de contribuir al calentamiento global.
Los larváceos, con su movimiento, y gracias al moco que las rodea, son capaces de capturar grandes cantidades de microplásticos y moléculas ricas en dióxido de carbono. Cuando la cantidad de partículas ha alcanzado su máxima saturación, entonces el moco se desprende y cae en el abismo donde se deposita en el fondo del océano.
Este proceso, gracias a los miles de millones de larvas presentes en los océanos, permite eliminar cada día grandes cantidades de microplásticos y de dióxido de carbono presentes en los océanos.
Según los científicos, los larváceos son capaces de filtrar hasta 80 litros de agua por hora, logrando filtrar miles de millones de litros de agua cada día ayudando así a limitar las graves consecuencias del cambio climático y la contaminación humana.
Una vez más es sorprendente descubrir cómo la naturaleza puede reaccionar de manera extraordinaria protegiéndose de la contaminación causada por las actividades humanas.
Cada criatura que vive en el planeta, incluyendo las larvas come-plástico, tiene la función de mantener y preservar el equilibrio natural para el bien de todas las especies vivas.
