Cultivar en la terraza: consejos para crear un jardín en la ciudad
La emergencia sanitaria relacionada con el Covid-19 ha obligado a muchas personas a examinar la forma en la que compramos. Las largas colas frente a los supermercados, las limitadas entregas a domicilio por parte de las grandes cadenas y los cierres de restaurantes han llevado a muchos a buscar alternativas para llenar los frigoríficos, las despensas y las tiendas de barrio. Pero también se ha despertado el deseo de producir lo que termina en la propia mesa.

Las ventajas del jardín casero
El deseo de saber que un determinado tipo de producto es seguro podría dar lugar a un crecimiento de los agricultores no sólo en las zonas rurales, sino también en las ciudades. No es una coincidencia que el aumento de las compras de productos envasados en la fase de máxima urgencia esté vinculado a los temores generalizados de que los productos a granel puedan ser un vehículo de contagio. En general, la autoproducción de frutas y verduras da la certeza de consumir alimentos no contaminados, sostenibles y de calidad.
La agricultura urbana, término que engloba diferentes tipos de cultivo, no es un fenómeno nuevo en las ciudades españolas. Sólo por dar un ejemplo, entre los edificios de Madrid y sus suburbios no es raro encontrar jardines compartidos por los ciudadanos. Sin embargo, no todo el mundo tiene la suerte de disponer de una pequeña parcela de tierra entre los rascacielos o de tener un patio en el que desarrollar sus habilidades. El espacio es el principal límite para los aspirantes a agricultores urbanos.
Qué cultivar
Los más aventureros pueden aprovechar las terrazas y los tejados para empezar a montar su propio huerto. ¿Pero qué crecer en un espacio tan pequeño? En el balcón pueden crecer tomates, pimientos picantes, ensaladas y plantas aromáticas como el romero y el tomillo. La remolacha, las habas y las zanahorias también son adecuadas para el cultivo en macetas y otros recipientes. Claramente se tienen que dar ciertas condiciones para obtener una buena cosecha. Si sólo tenemos un balcón expuesto a la luz del sol, podríamos aspirar a cultivar como mucho una planta de albahaca.
Los primeros pasos
Para las personas que estén decididas a construir su propio huerto cuando vuelvan de las vacaciones, el consejo es el de no arriesgarse demasiado cuando se empieza de cero. El primer paso podría ser empezar cultivando pequeños vegetales para ver que tal van. Es necesaria una fase de prueba para que entendáis vuestras habilidades y también los límites del lugar del que disponéis en casa.
